jueves, 30 de agosto de 2012

Amor, Vida, Amor

Nadie puede, lamentablemente, decirte qué está bien o qué está mal. Nadie puede decírtelo, nadie puede juzgarte por absolutamente nada. ¿Quién sabe lo que está mal o lo que está bien?
Yo creo que nadie puede decirte, nadie puede enseñarte. El camino de la vida se trata de vivir y se trata de aprender a vivir. Pero en el camino uno conoce gente, personas, sueños, sentimientos, etc y la cosa va cambiando. Porque uno, en el camino, conoce el amor; y el amor es la vida. La vida se aprende a vivir, el amor se aprende a amar. La vida enseña a aprender a amar la vida. Cosa rara, lo sé.
Cuando uno aprende a amar, es porque conoció personas. Y el amar a las personas sí enseña. Ahí es cuando precisamente cambia todo. Porque en el amor, y solo en el amor, uno se da cuenta qué está bien y qué está mal. Amar implica darnos cuenta si estamos lastimando o no a otra persona, implica darnos cuenta si nos estamos lastimando a nosotros mismos. Interesante, por lo menos para mí.
La vida, entonces, está marcada por el amor. Porque la vida es amor. Por eso el novio le dice a la novia: "Sos mi vida", por eso amar "más que a la vida" denota un amor inmenso. Conocer o no el amor, es conocer o no la vida misma.
Por eso, creo, nadie puede decirte qué está bien o qué está mal...Hasta que conoces el amor, hasta que conoces a la vida, hasta que te relacionás con otras personas, y todo es distinto. Porque entonces uno sí sabe que está bien o qué está mal.
Después que hacemos con eso, es otra cosa.