domingo, 30 de julio de 2017

24 de julio

El viento y el invierno piden un tiempo,
se hacen amigos y los observan,
se están matando en la cama,
se están atornillando en la piel.
Julio los envidia en el afuera, pero ni él ni ella se quieren despegar.
¿Podemos alejarnos de nuestra lucha por un rato?
Hacer el amor es nuestra revolución
Se van a tatuar ese momento para siempre,
sus retinas soldarán la mirada en el sudor.
Se odiarán con el tiempo, se extrañarán,
se olvidarán de los olores del otro,
quizás nunca de ese instante fugaz,
único
atemporal.
No somos de nadie, sino de momentos
le dice ella al oído.
Él no puede más que sonreir,
todavía tiene mil errores que cometer.
Van a llorar
y van a volver a compartir las sábanas,
el mate y el barrio.
Otra vez llorarán,
y lloverán,
los injustos,
los opresores,
los destructores,
los inmorales,
los tibios.
Y se irán separados por la lluvia,
sin bombones ni palabras al oído.
Se irán las canciones descuartizadas,
los budines,
las manos llenas de ternura,
los puños llenos de convicción.
Desaparecerán,
trasformarán,
convergirán,
lamentarán.
Volverán a caminar las calles
que nada igual tendrán
mas ahí mismo seguirán
esas caras y esas ollas vacías.
Seguirá ahí el pueblo, el mural,
las esperanza arruinada
la energía arrebatada y
la compañía del codo a codo.
Con el tiempo dibujarán
y reinventados estarán
en la calle ya saben
sus miradas no encuentran más.
Corazones rotos, manos atadas
la lucha llamará otra vez
en veredas opuestas quizás
perdidos en la memoria.
Pero siempre serán
lo que fueron aquella vez,
dos almas fundidas
en el instante compartido:
Recuerdo acalambrado
un te quiero sonrojado
hasta siempre,
Hasta la victoria.

miércoles, 19 de julio de 2017

II

Frío
Frío en la habitación.
Silencio en el corazón,
una melodía triste, 
una risa callada,
dos miradas cruzadas.
Preguntan por la justicia,
se responden en las mejillas,
se buscan,
acarician sus lágrimas,
sanan en cercanía,
callan. 
Besan, se besan,
acumulan sudor,
lavan sus pieles,
debaten sobre el rencor,
la educación y la mujer,
dialogan, se escuchan,
se admiran.
Es ahora,
se duerme la helada,
despiertan acalorados,
en el espacio entre sus alientos,
viven y respiran,
mañana lo harán otra vez.

domingo, 2 de julio de 2017

I

La brisa invita a la calma,
el silencio acopla la soledad.
Se vuela el misterio de la lágrima
viene bajando y besa su mejilla.
Dime chinita cabello de trigo:
¿Por qué no has sido feliz hoy?