martes, 29 de junio de 2010

El pucho comienza a acabarse. Si incinera en ese hueco de vicio y maldad asesina. El humo que penetra y tranquiliza sabiendo que destruye pero con una calma aterradora.
¡Quiero que me destruyas! Hacelo, tranquilizame, pero tambien demostrame.
Si o si te necesito. Que ganas de fumarte, una ultima vez para darme un aliento. No de vida, de hacerme ver la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Acompaña mi camino